El canal de Lachine
A mediados del siglo XIX, Montreal competía comercialmente con NY. Si, esa NY. Para mantener esta competencia viva, era necesario infraestructura. Por ende, se construyo en Montreal un canal de navegación acuática para grandes barcos de la época. Este canal es conocido como Lachine. El canal tiene salida al puerto de Montreal, que a su vez orilla con el rio San Lorenzo (St. Lawrence), que a su vez desemboca en el océano Atlántico. Montreal esta en donde esta, por su inmediato acceso al rio y consecuente actividad comercial. Poco a poco se fueron construyendo fabricas a lo largo del canal, lo cual permitía embarcar sus productos eficazmente y exportarlos ya sea para Europa o para la costa este de Norteamérica. El canal se fue expandiendo con los tiempos y con el tamaño de los barcos.
Como peculiaridad del canal, el agua que corre en este canal (aun hoy), es usada como fuente hídrica de energía para operar algunas correas industriales y equipos del estilo. El agua es aprovechada a su máximo.
La decada de la decadencia
Los vecindario colindantes al canal se convirtieron en barrios obreros, en donde -naturalmente- vivian -en su mayoría- los obreros quienes trabajaban para las fabricas ubicadas en el canal. Los barcos y NY siguieron creciendo con los tiempos, a tal punto que ya los navieros no podían circular por el canal debido a su tamaño. El canal de Lachine tenia fabricas de lado y lado, así que expandir el canal no era posible. Se construyo entonces un canal lateral con mas capacidad. Aun así -para bien o para mal-, después de los años 50’s del siglo pasado, la actividad industrial de canal comenzó a decaer. Esta decadencia se trajo consigo buena parte de la ciudad y sus vecindarios. A medida que lo nuevo era vivir en los suburbios, los vecindarios St. Henri, Petit Burgongne, La Salle, etc. se convirtieron en lugares no muy bonitos de la ciudad. El escenario anterior ha sucedió en muchas ciudades occidentales, desde Londres hasta buena parte del midwest estadounidense. Junto con la decadencia de la actividad manufacturera tomada por la India y por la China, no quedo un escenario bonito.
Para la decada de los 70’s el canal de Lachine era un paisaje de fabricas abandonadas, el canal en si se convirtió en un vertedero de basura y los vecindarios aledaños tomaron la fama de estar entre los mas deprimidos de la ciudad de Montreal.
El renacimiento
En el año 1978, Parques Canada tomó posesión y propiedad del Canal de Lachine. La idea era renovar el sitio. Se construyo entonces una pista de bicicletas de 14.5 Km de largo. Lo que ha hecho parques Canada desde ese momento ha sido mantener la pista de bicicletas y sus alrededores. Simplemente cortando la grama, cuidando los arboles, los laterales de la pista no son mas de 15 m de lado y lado. Parques Canada también ha limpiado el canal, convirtiéndolo en un canal de navegación turístico (los barcos de carga no transitan mas por el canal) para kayaks, botes y lanchas. Sin embargo las fabricas y sus vecindarios siguen ahi. Este mantenimiento del canal se hace desde finales de Abril hasta Noviembre. Luego, el area no se toca mas, pues se congela 🙂
Como reto adicional, muchas de las parcelas de las fabricas, son terrenos contaminados, que aun siendo demolidos, habría que gastar dinero en descontaminación. Lo que comenzó a suceder fue que algunos de los edificios gigantescos de las fabricas fueron convertidos en lofts, y por su ubicación eran aptos bastante grandes y baratos. Para mas ñapa ubicados relativamente cerca del centro de la ciudad.
El canal esta servido por el mercado de Atwater desde hace décadas (de cuando la época obrera). El mercado poco a poco ha ido cambiando su oferta, pera atender a sus nuevos clientes.
Luego que las viejas fabricas fueron convertidas, se comenzó a construir nuevos edificios con diseños bastante fashion, pero aun así accesibles a la clase media. Yo conozco el canal y el vecindario pues vivi en uno de esos edificios por tres años. Durante el verano/otoño, el sitio es simplemente espectacular, bicicletear por el canal es un placer y una de las razones por la que me encanta Montreal. Actividad que hago frecuentemente.
Poco a poco el canal se convirtió en un sitio de referencia en la ciudad y hoy en día esta entre las top tres paseos de bicicletas de Norteamérica. Los vecindarios aledaños siguen siendo poblados por clase obrera, pero las areas que bordean el canal están siendo ocupadas por nuevos edificios que van desde clase media hasta penthouse chics!
No todo es tan bonito
Todo este proceso de gentrificación del canal ha generado sus luchas. Específicamente en lo referente a los impuestos que paga cada inmueble anualmente (derechos de frente, como se le conoce en Vzla). Como en muchas ciudades del mundo, los impuestos caseros se basan en un porcentaje del valor del inmueble. Este valor del inmueble se calcula a su vez en base al precio del mercado de los inmuebles en el vecindario. Con todas estos nuevos proyectos inmobiliarios invadiendo el canal, los impuestos caseros de la zona han subido considerablemente y muchas de las personas de los vecindarios no ven con buenos ojos este renacimiento pues literalmente les pega en los bolsillos.
Recuerdo que el edificio en donde vivía de vez en cuando amanecía con grafittis del estilo Richs don’t belong here (los ricos no pertenecen aquí). En otros edificios que se están construyendo, hay grafittis en sus vallas, estos reclaman viviendas sociales dentro del complejo que se construye. También ha habido protestas hacia nuevas construcciones.
El apto en donde vivia, era muy cómodo pero pequeño, no tan pequeño como al apto en donde llegue, pero efectivamente era para una pareja -cuando mucho-. Aun así, no soy una persona que se pueda llamar pudiente, pero a los ojos de los residentes del vecindarios todo quien viva ahi, era rico. En donde habre vivido esto yo antes?
El progreso no se detiene
De todas maneras, por mas que algunos residentes protesten la llegadas de estos nuevos condos, es inevitable que la expansión se detenga. Areas antes deprimidas ahora florecen en gente y actividad comercial. La alcaldía local no puede darle la espalda a estos eventos que le incrementan el ingreso en impuestos.
Si ves nuevos proyectos habitacionales y crees que son solo para el 1%, no todo lo que brilla es oro.
One thought on “El canal de Lachine”